Los futuros de la harina de soja de China se desplomaron el jueves debido a las crecientes preocupaciones de que un resurgimiento de los brotes de peste porcina africana en la enorme piara del país afectará la demanda del ingrediente clave de alimentación animal en los próximos meses.
Los futuros de harina de soya más negociados de China en la Bolsa de Productos de Dalian para entrega en mayo cayeron un 4,3% a 3.176 yuanes (488,78 dólares) por tonelada en el comercio matutino, cerrando un 3,56%, la mayor caída diaria en más de dos años.
La caída se produce en medio del creciente consenso del mercado de que la peste porcina africana, además de otras enfermedades porcinas, ha afectado significativamente a la manada reproductora del país en los últimos tres meses y podría empeorar.
“Definitivamente alcanzó su punto máximo durante el invierno, y aunque deberíamos haber pasado eso, se está prolongando”, dijo Wayne Johnson, veterinario de Enable Ag-Tech Consulting, con sede en Beijing.
El analista ganadero Simon Quilty dijo en una conferencia a principios de este mes que se habían sacrificado entre 7 y 8 millones de cerdas desde enero.
“El mercado espera que la peste porcina africana se extienda más al sur de China”, dijo Wang Xiaoyang, analista de Sinolink Futures.
Los futuros de la harina de soya habían alcanzado niveles récord a mediados de enero, ya que la rápida reconstrucción de la manada de cerdos de China de una devastadora epidemia de la enfermedad durante 2018 y 2019 impulsó una fuerte demanda de la proteína.
Pero las preocupaciones sobre la caída de la demanda ahora han superado las preocupaciones anteriores sobre los suministros, ya que los retrasos en los envíos de importaciones de soja brasileña llevaron a algunas trituradoras a considerar recortar la producción.
“Ahora parece que la debilidad de la demanda podría contrarrestar el impacto de la demora en la carga”, dijo un gerente de una trituradora con sede en el norte de China, quien dijo que las existencias de harina se estaban acumulando.
Los usuarios finales también acumularon existencias antes de las vacaciones del Festival de Primavera en febrero, por lo que la demanda naturalmente cayó después de las vacaciones.
Fuente: Regina Leader-Post