La mejora de los precios y el aumento de la producción han motivado a los porcicultores del Norte de Santander, consideran que el sector, a pesar de las dificultades causadas por la pandemia, está en alza.

Luis Lima, director de la Cooperativa de Porcicultores Norte de Santander (Coporcinor), dijo que 2020 fue muy positivo. Este era un sector muy afectado por el contrabando, pero con la situación en Venezuela estas tasas bajaron y el consumo en el departamento aumentó.

“Hasta enero de 2021 pudimos tener precios de $ 7.500 a pie y $ 9.500 en canales, lo cual fue muy bueno. Ahora están cayendo, pero la recuperación fue importante. Además, esto motiva al emprendedor que ve que su producto y su finca se vuelven estables y rentables ”, dijo Lima.

Dijo que ahora el trabajo en el que se están enfocando es hacer que sus fincas sean técnica y ambientalmente amigables, ya que esto les da un valor agregado.

“Necesitamos seguir creciendo y repetir episodios como los que vivimos el año pasado, cuando hubo momentos en que las fincas vendieron toda la producción mucho antes de lo planeado”, dijo Lima.

Los productores de Norte de Santander también están trabajando en la adjudicación de la planta de beneficio, herramienta que les permitiría mejorar mucho más su calidad.

Llevan varios años trabajando en el proyecto y esperan consolidarlo pronto, para tener más habilidades que les permitan competir a nivel nacional e internacional.

Panorama nacional

Jeffrey Fajardo, presidente ejecutivo de Porkcolombia, quien conversó con productores en Norte de Santander, dijo que el mercado sigue creciendo y por eso debemos estar a la vanguardia de lo que necesita el comprador.

El portavoz de los porcicultores señaló que hay buena calidad en la zona, pero es necesario seguir trabajando para mejorar.

El funcionario dijo que, gracias a la caída de las importaciones de carne de cerdo, el 87% del consumo local en 2020 se cubrió con producción nacional.

“Logramos un crecimiento de la producción del 5%, pasando de 446,627 toneladas en 2019 a 468,880 toneladas en 2020, comportamiento que se destaca si tomamos en cuenta la contracción histórica de la economía nacional y mundial”, dijo Fajardo.

Destacó que, si bien fue un año atípico, es muy importante contar con un plan estratégico que les permita mantenerse a flote a pesar de todas las restricciones que tuvieron que enfrentar debido a la pandemia.

“El poder pasar del 80% al 87%, un nivel que no veíamos desde 2012, en el consumo nacional, compensó la leve disminución del consumo aparente en 2020”, dijo Fajardo.

En cuanto al consumo per cápita, Fajardo informó que alcanzó los 10,8 kilos. “El avance es significativo cuando vemos que en 2010 solo fueron 4,8 kilos; En 2019 llegamos a los 11,2 kilos, es decir, un incremento del 133% en 10 años. Y aunque en 2020 hubo un ligero descenso hasta los 10,8 kilos, todavía tenemos un buen indicador ”.

“Sin duda, la cría de cerdos es un sector importante para la economía del país. La apuesta para el 2021 es transformar lo que hemos hecho, para poner a disposición del consumidor carne de cerdo de excelente calidad. Sabemos que esto aumentará las ventas y la rentabilidad de nuestros productores ”, dijo Fajardo.