Brasil estima que costos de producción puede aumentar un 35%

Los altos precios del maíz y la soya indican el inicio de un nuevo problema para la producción de proteína animal, especialmente en Santa Catarina, que depende de la importación de maíz de otros estados. Los costos de producción avícola y porcina podrían subir hasta un 35% este año, estima el presidente de la Asociación Avícola Catarinense (Acav), José Antonio Ribas Junior. Estos costes más elevados preocupan especialmente a los pequeños mataderos y también afectan a la producción de leche y huevos.

El precio del maíz alcanzó el nivel más alto de la historia porque el cereal escasea en Brasil y en el mundo. Con las exportaciones en alza a China y el real devaluado, el precio de la bolsa del producto se acerca a los R $ 100 en el Oeste de SC, lo que representa alrededor de un 70% más que en febrero del año pasado. El maíz representa el 70% de la composición de la alimentación animal.

La soya, que constituye el 30% del alimento y representa este mismo porcentaje en el costo de alimentación de aves y cerdos, tuvo un reajuste de precios de aproximadamente un 150% en un año. La bolsa de 60 kilos costaba R $ 48 en febrero de 2020 y ahora cuesta R $ 120.

El presidente de Acav advierte que, debido a las dificultades del mercado interior provocadas por la pandemia, será difícil trasladar todo este coste al consumidor. Esto significa que a los refrigeradores pequeños les resultará muy difícil mantener las actividades. Como es un problema que persistirá durante meses, puede haber una ola de ventas de estas empresas o quiebras como ocurrió en la escasez de maíz de 2012 por la caída de la producción en EE. UU. Las grandes agroindustrias exportadoras tendrán mejores condiciones para enfrentar estas adversidades.

El diputado estatal y ex-secretario de Estado de Agricultura, Moacir Sopelsa, advirtió en una sesión virtual de la Asamblea Legislativa, este jueves, sobre la necesidad de invertir en la terminación de un ferrocarril que trae grano desde la Región Medio Oeste a Santa Catalina. Según él, la situación es más difícil en el Estado porque los cultivos de maíz en grano y maíz ensilado se vieron afectados por la sequía y la nueva plaga de insectos salta hojas. 

La industria de proteínas, luego de las altas ganancias en 2020 impulsadas principalmente por las exportaciones de carne de cerdo y las buenas ventas generales en el mercado interno, ahora tiene un año desafiante por delante. El sector tiene que enfrentar este vaivén del mercado internacional de granos porque Brasil no puede hacer un stock mínimo regulatorio de cereales, ni limitar las exportaciones para proteger, al menos parcialmente, el mercado interno y el consumidor del país. 

Fuente: Avicultura Industrial

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